Trump intentará reducir un 50% el presupuesto científico de la NASA. Es tan devastador que Elon Musk se ha desligado

La Casa Blanca ha presentado una propuesta preliminar de sus presupuestos para 2026. Si el Congreso de Estados Unidos los aprobase, la NASA vería un 20% menos de dinero el próximo año, pero con un giro especialmente polémico, porque serían recortes centrados en la ciencia.
Una pérdida devastadora. La NASA es la agencia espacial más grande e influyente del mundo. Su Dirección de Misiones Científicas financia algunas de las investigaciones más importantes para el avance de la astrofísica, la ciencia planetaria, la ciencia terrestre y la heliofísica. Estudios en los que a menudo participan entidades internacionales como la Agencia Espacial Europea.
Las dos misiones planetarias más importantes que no seguirían adelante con los presupuestos de la Casa Blanca son, por un lado, Mars Sample return, la recuperación de muestras de suelo marciano que ha estado recogiendo el rover Perseverance, y la misión DAVINCI para explorar Venus. Ambos hitos quedarían en manos de China, que tiene misiones similares en su hoja de ruta científica.
¿Adiós al Goddard? Según Ars Technica, los recortes parecen diseñados para forzar el cierre del Goddard Space Flight Center, la sede de la NASA en Maryland, que emplea a 10.000 funcionarios y contratistas, y desde donde se operan misiones icónicas de observación cosmológica, terrestre y del Sol. Los recortes afectarían de la siguiente manera a cada rama científica:
En NOAA salen incluso peor. La administración de Donald Trump también busca eliminar casi toda la investigación climática que realiza la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA), según denuncia la revista Science.
Al igual que la NASA, NOAA es una de las principales agencias científicas del mundo, pero en el ámbito meteorológico, del clima y del clima espacial. Los recortes cerrarían la Oficina de Investigación Oceánica y Atmosférica (OAR), y dejarían sin trabajo a cientos de científicos que estudian el calentamiento global.
A la espera del Congreso. La NASA dispone de un plazo de 72 horas para apelar estas cifras antes de que se incorporen a los presupuestos finales. En última instancia, será el Congreso de Estados Unidos quien los apruebe.
Es probable que los recortes se encuentren con una fuerte oposición en el Congreso, muy sensibilizado con la idea de perder terreno frente a China. "Esto diezmaría el liderazgo estadounidense en el espacio e infligiría un gran daño a los centros de la NASA en todo el país", dijo a Ars Technica el congresista George Whitesides, del Comité de Ciencia. Sería como un "evento de extinción".
Imagen NASA